Recuerdos de Oropesa (XII)

Hay algo en las cercanías de Oropesa que se echa de menos aquí: carreteras secundarias desiertas que parecen no conducir a ninguna parte pero que juntas conforman una densa red que puede llevarnos a casi cualquier rincón de la provincia.

Destino

Coger el coche y conducir sin rumbo aparente entre campos de almendros y naranjos para acabar apareciendo en algún pueblo remoto es algo incomparable que le hace sentir a uno como un auténtico aventurero.

Otro día os mostraré alguna imagen captada en esas excursiones a las que me refiero; pero de lo que hoy quería hablar es de aquella tonta sensación de libertad. Sensación que también se puede conseguir en la comunidad de Madrid; aunque aquí hay que hacer muchos kilómetros hasta conseguir alejarse de la civilización.

Y es que esa sensación de surcar a ritmo tranquilo carreteras estrechas y sin pintar (y a veces incluso sin asfaltar) mientras nos movemos entre el Mediterráneo y las montañas es algo que no olvidaré porque, aunque desde pequeño pasé todos mis veranos en Oropesa del Mar, nunca me había dado por recorrer el interior de Castellón en busca de lugares desconocidos.

Como siempre os digo, estas pequeñas aventuras de cada día son las que más me gusta compartir con vosotros; así que espero que disfrutéis tanto de las entradas ya publicadas como de las que están por llegar en próximas fechas.

¡Nos leemos!

Rincones: entre Oropesa y Torreblanca

Existen dos carreteras principales que recorren todo el litoral de la provincia de Castellón y por las que transita el 99% de los vehículos que se mueven entre las localidades de la zona: la N-340 y la AP-7. Sin embargo, si la prisa no nos persigue y tenemos ganas de disfrutar del paisaje, perderse por las carreteras secundarias que nacen y mueren en los pueblos de la zona puede ser un verdadero placer para la vista, el oído y el olfato.

Camino hacia el mar

Precisamente de los caminos y carreteras comarcales que existen entre las localidades de Oropesa del mar y Torreblanca han salido las imágenes que ilustran esta entrada. Señales de tráfico, casas de lo más coloristas, puentes de piedra, vías de tren… detalles en los que no podemos fijarnos yendo a 100 Km/h y/o cuando existe un guardarail entre el campo y el asfalto.

STOP

Invernaderos

Hasta el infinito

Rojo, azul, verde

Puente

Ya sabéis lo mucho que me gusta disfrutar de esos pequeños detalles que tenemos a cinco minutos de nuestras casas…