Tres fotografías de un mismo atardecer

Tres instantáneas de Benicassim captadas desde el mirador de la torre Colomera durante el atardecer del pasado sábado. Como no sé con cuál quedarme os dejo a vosotros elegir por mí.

Se va el sol

Las últimas luces

Bicolor

¡Un saludo!

Historias del asfalto

Fue un bordillazo. Estoy seguro.

Historias del asfalto

No necesito más que un fotograma para imaginar un coche antiguo tomando a demasiada velocidad la glorieta con sus neumáticos chirriando en mitad de la noche y, tras el volante, un conductor inexperto bloqueando las ruedas al darse cuenta demasiado tarde de su enorme imprudencia.

Ese vehículo, que al derrapar sigue una línea recta, acaba encontrándose con los adoquines que marcan el inicio de la acera golpeando con tanta fuerza la rueda delantera derecha que la llanta escupe ese feo tapacubos que horas después seguiría inerte sobre el pavimento.

Caras de circunstancias mientras en compañía de la policía local tres personas esperan la llegada de la grúa con el termómetro marcando apenas cuatro grados. No les caerá una multa; pero suficiente castigo será explicar en casa lo sucedido.

Pequeñas historias ocultas en los detalles que nos vamos encontrando allí por donde vamos y que mantienen despierta nuestra imaginación. Por eso son tan importantes.

Alcalá desde el aire (I): la rotonda de Fiat en 1990

Después de encontrarme aquella fotografía de la depuradora Oeste de Alcalá realizada hace aproximadamente dos décadas, me he animado a compartir con vosotros algunas de las imágenes tomadas desde el aire que aparecen en los libros de fotografía  de Alcalá que hay por mi casa y que muestran la ciudad desde un punto de vista que nos ayudará a ver con claridad los cambios que han tenido lugar en los últimos años.

De hecho, esta es la primera de una serie de entradas empleando las fotografías que os digo acompañando la imagen de turno con un par de párrafos sobre la zona que comprende y explicando un poco cómo ha cambiado el lugar durante el tiempo que ha transcurrido desde que se tomó así como un enlace a Google Maps para que os podáis hacer una idea del aspecto actual del lugar. Del mismo modo, añadiré algunas notas aclaratorias y una localización en un mapa a las que podréis acceder haciendo click sobre la propia imagen (os llevará a su página en Flickr).

Así pues, para iniciar esta mini-serie, vamos a volar hasta un lugar que muchos de vosotros conoceréis por los interminables atascos que se forman: la rotonda de Fiat.

Rotonda de Fiat

Rotonda de Fiat en 1990. Fotografía extraída del libro "15 años de ayuntamientos democráticos". (Click sobre la imagen para ver notas y localización geográfica).

Puede que de primeras os haya costado un poco reconocer el lugar, pues en la fotografía que os muestro no están la gasolinera Repsol que hay junto a la glorieta, el hotel Ibis o el supermercado que hay allí actualmente, del mismo modo que el tramo de carretera que ahora mismo conecta con la A-2 simplemente no existía y en la propia glorieta no había ningún tipo de fuente ni césped ornamental.

Si os fijáis en la parte superior izquierda, la ciudad deportiva El Juncal que actualmente comprende varios campos de fútbol de hierba artificial además de otras instalaciones multidisciplinares, por aquel entonces apenas era un páramo con un campo de tierra. Y aunque por las sombras se ve que la fotografía está hecha a mediodía, la cantidad de coches que circulan por la carretera es ridícula comparado con lo que uno se encuentra por allí a cualquier hora.

De cualquier modo, el aspecto actual de esta zona volverá a cambiar en los próximos meses con la construcción del túnel subterráneo que, en teoría, aliviará parte de los atascos que se forman en esta glorieta, por lo que cuando la obra esté finalizada será todavía más impactante echar un vistazo a esta entrada y ver el aspecto de este rincón de Alcalá en el año 1990.

En la próxima entrada volveremos a sobrevolar la ciudad para visitar otro rincón que os sorprenderá.

La glorieta más ridícula del mundo mundial

Hay una glorieta (ciertas personas prefieren llamarlas rotondas o incluso redondas) en pleno centro de Alcalá de Henares que es el hazmereír de todo conductor que pasa por ella y que se ha convertido en el elemento más característico de la calle Daoiz y Velarde de la ciudad complutense.

En realidad, aunque esté marcada como glorieta a todos los efectos del código de la circulación es una simple farola subida en un pedestal que causó estupefacción entre propios y extraños cuando fue colocada en tan peculiar emplazamiento.

La glorieta mas rid�cula del mundo

Allí son habituales los golpes entre vehículos por despiste (al entrar en ella mucha gente no es consciente de que es una auténtica glorieta) o porque directamente se la tragan al girar, ya que si no se va muy atento y no se conoce la zona es posible no verla.

En fin, a Alcalá de Henares se la conoce principalmente por ser la cuna de Miguel de Cervantes, pero me parece que a este paso nos haremos famosos también por esta peculiar (y ridícula) glorieta.