Hace unas semanas me senté a responder las dudas que había pendientes en los comentarios del blog y al día siguiente recibí un e-mail de Mónica; la remitente de una de esas dudas. En su correo me decía que tanto la respuesta a su duda en particular (que versaba sobre objetivos macro y distancias focales) como los artículos fotográficos del blog le habían sido de gran utilidad y que le gustaría tener un pequeño detalle conmigo como a modo de agradecimiento.
Mónica es una de esas personas que combinan habilidad y arte (algo que a alguien como yo, negado para el dibujo y un auténtico manazas a la hora de afrontar cualquier trabajo manual, le resulta sorprendente) y dedica sus ratos libres a hacer caricaturas de personas y animales en fieltro para exponerlos en su web Pelusillas y trastadas. Lo que me comentó es que le gustaría regalarme un broche personalizado que pudiera poner en la mochila donde suelo llevar la cámara para así darle un toque diferente.
La verdad es que me pareció una curiosa iniciativa y me gustó la idea; de modo que le pasé a Mónica un par de fotos en las que se me viera más o menos bien y ella se puso manos a la obra; dando lugar a la pelusilla (así llama ella a este tipo de creaciones) que tenéis a continuación:
Cuando tuve el broche en mis manos por primera vez no pude evitar exclamar un sonoro «¡Qué grande!» y soltar una carcajada al comprobar que el muñequito sí que tenía un cierto parecido a mí así como unos cuantos detalles muy trabajados; de modo que lo puse en un lateral de mi mochila fotográfica que ahora tiene un detalle que la hace más personal y desenfadada.
Más allá del cuidado y el esmero puesto en la pelusilla que os muestro, lo que más me ha llamado la atención es que alguien haya tenido un detalle conmigo por el simple hecho de haberle echado una mano. Algo que en cierto modo me recuerda a aquella familia que me quería invitar a comer por haberles hecho una foto de grupo en el pueblo de Torre la sal; y es que este tipo de experiencias le dan un poco de color a la vida, ¿no creéis?.
Por supuesto, además del agradecimiento público a Mónica plasmado en esta entrada me gustaría pediros que, si os ha llamado la atención, os paséis por su web y echéis un vistazo a sus creaciones, ya que seguro que os sorprenden tanto como a mí y lo mismo hasta os animáis a que os hagan una propia. También le podéis echar un vistazo a su blog, donde los animales y las manualidades son protagonistas de la mayoría de las entradas y el optimismo campa a sus anchas entre párrafos y fotografías.