Uno de mis pequeños placeres de la semana: madrugar el domingo para salir a la calle en busca de imágenes llenas de sosiego y tranquilidad. Sé que a muchos os parecerá casi un delito el levantarse en fin de semana antes de las once de la mañana; pero es que nunca me ha gustado llegar al lunes con la sensación de no haber aprovechado el tiempo libre.
¡Os dejo con las fotos de esta mañana!
Columnas infinitas
Espacio denso (y desigual)
Nidito de amor
Pret-a-porter de espejos retrovisores
Cada día tratamos de romper las cadenas que nos atan al pasado
Estas cigüeñas ya no respetan ni a las gárgolas del palacio arzobispal...
Cruces y humedades
Cúpulas emergentes, brillantes como estrellas
Optimismo vital
Primavera que no llega (aunque se aproxima)
Apenas cuatro personas en toda la calle Mayor
La cigüeña-vigía
Un nudo en el corazón
Libros y rosas
