Sobre los comentarios en el blog

Me gustaría dedicar esta entrada a hablar de los comentarios que dejáis en el blog. Bueno, no me refiero a los comentarios como tales, ya que esos los voy respondiendo uno por uno; sino a algunos aspectos relacionados con este tema que de vez en cuando se me pasan por la cabeza pero que no dan como para redactar una entrada al completo. Por eso voy a enumerar una serie de puntos que considero de interés sobre el importante tema de los comentarios:

Lo primero de todo que me gustaría señalar es que leo absolutamente todos los comentarios que dejáis. Cada vez que alguien escribe un mensaje en el blog me llega una copia del mismo al email, y gracias a ello puedo saber de su existencia de manera relativamente inmediata. Lo que ocurre es que si bien leo los comentarios más o menos según llegan, a responderlos suelo dedicar un rato cada dos o tres días porque no siempre tengo tiempo (o ganas) para ponerme a ello.

Por lo tanto, si habéis planteado alguna duda o consulta en cualquier entrada del blog no os preocupéis porque antes o después responderé a ello ya sea para echar una mano o para decir que no tengo ni idea sobre el asunto planteado. El caso es que nunca dejo preguntas sin respuesta porque me gusta poder echar una mano a los demás.

C'est moi

De cualquier modo, en las últimas semanas me he dado cuenta de que el número de comentarios diarios se ha elevado considerablemente, y prueba de ello es que ahora mismo hay nada menos que treinta comentarios nuevos desde la última vez que me puse a responderlos (que fue hace apenas cuatro o cinco días). No tengo ningún problema en ello ni representa ningún agobio para mí, pero esto me ha llevado a ser algo más conciso en mis respuestas. Si antes me explayaba a la hora de responder a cualquier cosa, ahora intento ir más «al grano» pero siempre intentando dar toda la información posible.

También me gustaría aclarar que no poseo un control directo sobre los mensajes que son considerados como spam por el sistema de gestión interna del blog. A veces se cuelan como buenos comentarios que no son más que burda publicidad y en otras ocasiones comentarios perfectamente válidos se van a la carpeta de spam por contener alguna palabra clave o un par de enlaces. Como os digo, lo único que puedo hacer ante esto es echar un vistazo de vez en cuando a la carpeta de «comentarios no deseados» y rescatar de ella aquellos que están ahí por error. Por lo tanto, si veis que habéis escrito algo y no aparece de forma más o menos instantánea, lo más seguro es que salga a la luz al cabo de unas horas.

Bueno, pues por el momento eso es todo con respecto al tema de los comentarios. Siento la parrafada que os he soltado, pero como veo que a veces os surgen dudas sobre si leo los comentarios de las entradas antiguas y tal, prefiero dejar claro todo esto y que así veáis cómo gestiono este tipo de cosas.

¡Un saludo y gracias por leerme!

Cuando el marketing no es más que spam florecen las chapuzas

Ya que hace apenas unos días hablábamos del spam, os dejo una captura de pantalla de un email de éste tipo que me llegó ayer y que demuestra el grado de chapucerismo de los responsables de las redes sociales que emplean este tipo de estrategias para captar usuarios.

No está mal. Sobre todo teniendo en cuenta que la población de Alcalá de Henares en el 2008 era exactamente de 203645 personas. Esto significa que 4,18 de cada 1 alcalaínos quiere quedar con un chico de mi edad, algo que es estadísticamente incomprensible.

Son los riesgos de usar algoritmos aleatorios para generar miles de correos supuestamente personalizados para cada destinatario. En fin, cosas del spam.

Más spam y menos Prozac

Me encanta la carpeta de spam de mi cuenta de correo electrónico. Si a última hora de la tarde me siento triste no tengo más que meterme en ella, leer un par de correos y enseguida noto elevarse mi autoestima más allá de las nubes. Veamos lo que tenemos hoy:

abismo

– Un tipo de Uganda me ha dejado 800000 dólares en herencia. Para hacerme con semejante suma de dinero sólo tengo que ingresar mil doscientos dólares en una cuenta bancaria para cubrir los gastos de la transferencia y al momento me enviarán el dinero. Chachi, creo que el lunes no iré a trabajar.

– Una chica que afirma estar muy caliente (tal vez tenga algo de fiebre) y que responde al extraño nombre de How About dice que quiere hacerme unas cosas muy raras que no sé muy bien de qué van porque están escritas en inglés.

– Un tal Joseph me manda un archivo zip en el que dice que están las fotos de su novia desnuda. Y yo me pregunto, ¿qué gana él con mandarme esas imágenes? No lo abriré, pues prefiero que esas fotos queden en la intimidad de esa pareja, faltaría más…

– Otra chica inglesa (de Londres para más señas) dice que está triste y que se le pasaría con un revolcón conmigo. Yo me pregunto: ¿no tendrá algún inglés que le pille más a mano?

– ¡Coño! Un banco de inglaterra (no sé qué le ha dado a los ingleses conmigo hoy) anuncia a bombo y platillo que me ha tocado un millón de libras. ¡Soy multimillonario y yo sin saberlo! Me comentan también en este caso que tengo que pagar unos gastos de gestión y tal, así que el lunes a primera  hora me acercaré al banco y haré los dos pagos a la vez.

– Google me dice que he ganado 850000 libras en acciones de la compañía. Siempre he hablado bien de sus servicios en este blog, pero no creo que merezca tanto dinero por ello. Me conformaría con que me mandaran unas pegatinas… Vaya, tengo que pagar trescientas libras para poder cobrar el dinero. Entonces paso, que ya tengo un millón y medio de libras de los dos correos de antes y habrá que dejar algo para los demás, digo yo.

– Viagra con un 80% de descuento. Acabo de cumplir 30 años; todavía me falta bastante para necesitar esas cosas. Borrando…

– Una tal Nona (no sé si también será inglesa) dice que quiere una «crazy penetration». ¿Qué será eso? ¿Alguna nueva cámara de fotos tal vez? El caso es que tiene gracia que de repente tantas chicas me pidan cosas… Le contestaré diciendo que en eBay seguro que venden de eso.

En fin, y así unos cuantos correos más. Como os decía al principio de la entrada, cuando os sintáis tristes y/o apagados, meteos un rato en vuestra carpeta de correo basura y veréis cómo en apenas unos minutos os sentís los tipos más afortunados sobre la faz de la tierra. Y es que, parafraseando el título del conocido libro de Lou Marinoff, lo que hace falta hoy en día es más spam y menos Prozac.

Dirección de e-mail para los afectados por el parking de Nueva Alcalá

¿Recordáis lo que os conté hace un tiempo sobre el aparcamiento subterráneo de Nueva Alcalá cuya obra lleva varios meses parada? Pues bien, aunque me gustaría daros buenas noticias, no puedo hacerlo porque pese a que ha habido algunos avances que ahora comentaremos, a día de hoy la cosa sigue exactamente igual que en la fotografía que tomé hace un par de meses.

Aparcamiento en Nueva Alcalá

Dando una vuelta por la zona del aparcamiento, he observado que hay algunos operarios en la obra sacando contenedores de material, por lo que entiendo que los rumores que había escuchado sobre que la obra se iba a retomar en breve deben de ser ciertos. Del mismo modo, parece ser que la empresa encargada de la construcción del parking subterráneo ha enviado una carta a los afectados en la que comunica que las plazas se entregarán «lo antes posible» (cosa que habrá que coger «con pinzas» teniendo en cuenta que hasta ahora los plazos previstos no se han ido cumpliendo ni de lejos).

Reconozco que no soy uno de los afectados por este tema, pero hoy escribo esta entrada porque se trata de una situación que me parece tremendamente injusta y porque me habéis demostrado en multitud de ocasiones que sois bastantes los alcalainos que leéis este blog. Por eso me gustaría comentaros que si os habéis visto afectados por este desagradable asunto (habéis pagado una cierta cantidad de dinero por una plaza de garaje que ahora mismo sólo es un agujero lleno de agua sucia) tenéis a vuestra disposición una dirección de e-mail tras la que está María Jesús: una de las afectadas por la paralización de las obras del aparcamiento y que está llevando el tema a los medios de comunicación como muestran los dos ejemplos siguientes:

Diario Digital del Henares

Diario de Alcalá

María Jesús también ha expuesto el problema en los micrófonos de Onda Cero así como en el conocido informativo Madrid Directo; lo que da una idea de su nivel de concienciación con este asunto. Por eso mismo, cuando hace unos días se puso en contacto conmigo para pedirme que le echara una mano para difundir su causa no dudé ni un segundo en contribuir en la medida de mis posibilidades.

Os recuerdo que en estas cosas es bueno unir esfuerzos evitando así que cada persona actue por cuenta propia, por lo que os recomiendo que mandéis un correo a la propia María Jesús en parkingnuevaalcala@hotmail.com y os informéis de cómo está la situación del aparcamiento y qué medidas podéis tomar para tratar de solucionar esta situación.

Si sois alguno de los afectados por esa obra paralizada que no parece tener fin, os deseo la mejor de las suertes; pero como en la vida la suerte sin esfuerzo no sirve de nada, os animo a que hagáis frente común contra este abuso.

Actualización 11 de Diciembre de 2009: Después de dar una vuelta por la zona de la obra (hacía una semana que no pasaba por allí) he modificado un par de párrafos para comentar algunas novedades.

Review: iPod Touch 3ª generación (8 GB)

Tras usar durante infinidad de tiempo mi iPod Nano de tercera generación (que ahora emplea mi hermana en su aventura Erasmus por Bruselas) y el Classic de sexta generación, llevo unos días pegado a un iPod Touch de tercera generación con una capacidad de 8 GB que viene conmigo a todas partes. Desde que este modelo del icónico reproductor musical apareciera en el mercado allá por el 2007 siempre me han llamado mucho la atención, de modo que cuando el otro día ofrecían en el foro de Elotrolado.net uno apenas desprecintado por sólo 110 euros no me lo pensé mucho antes de aceptar.

iPod Touch 3ª gen (8 GB)

¿Qué tiene de particular un iPod Touch?

El iPod Touch es un gadget que mezcla la reproducción de música, vídeo y podcasts con otras características más avanzadas como la conectividad inalámbrica, navegación por Internet, gestión del correo electrónico, integración con Google Maps… así como la posibilidad de instalar las aplicaciones disponibles en la App Store de Apple. De todos modos, una definición muy empleada para hacernos una idea del concepto básico de este aparato es que se trata de «un iPhone sin phone».

Nada más abrir la caja del iPod Touch uno se encuentra en la mano con un aparato muy ligero y sobre todo muy esbelto: es tan fino y suave en los bordes que parece que se va a deslizar entre nuestros dedos. Del mismo modo, la cubierta trasera es del mismo material y estilo habitual en los reproductores de la firma de la manzana: acero cromado que se raya con mirarlo. De hecho, tras unos días de uso y sabiendo lo cuidadoso que soy con mis cosas, empiezan ya a aparecer en ella las típicas marcas que con el tiempo dejarán esta superficie prácticamente mate; que es como está ahora esa parte de mi iPod Classic.

En todo caso, me niego a emplear ningún tipo de funda en mis aparatos: pagamos una pasta por un teléfono un poco más delgado que el anterior o por un MP3 que podamos llevar en el pantalón sin notarlo y le cascamos una gruesa funda de silicona que multiplica su volumen por dos y hace que sacar el gadget del bolsillo se convierta en un sufrimiento. Yo lo siento por los arañazos de la cubierta trasera, pero no veréis un gadget de mi propiedad envuelto en una fea funda de silicona; aunque sí que es verdad que ya procuro que en el bolsillo donde va el iPod o teléfono de turno no haya ninguna otra cosa (llaves, monedas…). Y es cierto que hubo una época en la que compré un par de fundas para mi iPod Nano e incluso hice una comparativa entre ambas; pero sopesando los pros y los contras al final opté por llevarlo «a pelo» en el bolsillo.

iPod Touch 3ª gen (8 GB)

Como os decía el reproductor es realmente delgado: bastante más que el iPod Classic y más o menos en la línea de grosor del iPod Nano de tercera generación. Sus medidas en concreto son 110 × 61 × 8 mm. En cuanto al peso, se queda en 115 gramos. El reproductor, visto desde arriba es un poco más alto que un Classic, pero en su delgadez es donde reside su gran ventaja en cuanto a la portabilidad del mismo.

iPod Touch 3ª gen (8 GB)

La filosofía Touch

La filosofía del iPod Touch es muy diferente a la de los reproductores más clásicos de la marca de la manzana equipados con la típica rueda táctil. En este caso, el aparato sólo tiene tres botones físicos: un botón de inicio bajo la pantalla, otro de bloqueo en el borde superior y un pulsador doble en el lateral que sirve para subir y bajar el volumen sin tener que andar trasteando con la pantalla. En la parte inferior se puede encontrar el típico conector para sincronizar y cargar los iPod así como el jack estándar de 3,5mm para conectar los auriculares.

Por lo demás, todo el manejo del iPod Touch se basa en el empleo de la pantalla multitáctil de 3.5 pulgadas y resolución de 320 x 480 píxels. Pulsando sobre sus iconos arrancaremos las aplicaciones que nos permitirán escuchar música, ver vídeos, navegar por Internet, acceder a la tienda virtual de Apple, consultar el e-mail, acceder a Google Maps, mirar las cotizaciones de la bolsa, la previsión meteorológica… y todo lo que podamos imaginar mediante la instalación de aplicaciones externas como luego veremos.

iPod Touch 3ª gen (8 GB)

Actualmente el iPod Touch se comercializa en 3 tamaños: 8 GB, 32 GB y 64 GB; si bien el más pequeño no es más que uno de segunda generación con firmware actualizado a la última versión; y de ahí su bajo precio (oficialmente cuesta 179 euros; mientras que las versiones de mayor capacidad se van a los 269 y 359 euros respectivamente). Exceptuando algún detalle, la funcionalidad es la misma, por lo que todo aquello que os comente sobre el modelo básico se puede extrapolar a los dos modelos superiores.

En cualquier caso, no es la capacidad de almacenamiento lo que más me llama la atención del iPod Touch; sino el conjunto de todas sus características. Para llevar encima toda mi música y mis podcasts ya tengo los 80 GB del iPod Classic, por lo que el Touch lo tengo para emplear sus caracterísiticas multimedia y llevar una selección de unos veinte discos que me puede apetecer escuchar en cierto momento. Selección que voy cambiando de vez en cuando en función de mis gustos musicales o los álbumes que más esté escuchando en una época determinada. Más o menos lo mismo que hacía cuando el iPod Nano era mi único reproductor portátil.

La importancia del Wi-Fi

Sobre el papel, el Touch promete muchas cosas que hay que coger un poco con pinzas: si estamos bajo una red Wi-Fi a la que podamos conectarnos disfrutaremos de todas sus funciones, pero fuera de su cobertura la funcionalidad del Touch queda un poco mermada. Podemos arrancar la aplicación del correo (compatible con la mayoría de las cuentas POP3 e IMAP, por cierto) y escribir un borrador estemos donde estemos; pero no podremos mandarlo hasta que nos conectemos a una red Wi-Fi. Del mismo modo, Google Maps también toma los datos de Internet, por lo que sin conexión a la red de redes no podremos consultar ningún dato. Si necesitáis consultar todas estas cosas estéis donde estéis, vuestras necesidades van más enfocadas a un iPhone o similar; es decir, un dispositivo que se conecte a Internet mediante la red de telefonía móvil, pues así no dependeréis de encontrar una red Wi-Fi abierta; algo que en España todavía no es tan común como en EEUU o Japón.

iPod Touch 3ª gen (8 GB)

Como estáis viendo, la conexión Wi-Fi es el eje central de todas las funciones de conectividad del iPod Touch, por lo que siempre estaremos limitados a encontrar una red inalámbrica a la que conectarnos si queremos aprovechar todo su potencial. En caso contrario, el iPod Touch es un reproductor multimedia fantástico que además cuenta con una gran autonomía; pero no podremos disfrutar del resto de sus características al 100%.

De todos modos, para no alargar demasiado este artículo os voy a enumerar algunas características del Touch que me han gustado especialmente para luego puntualizar otras que no me han hecho demasiada gracia. Creo que será mejor hacerlo así, porque si voy enumerando características párrafo tras párrafo esto puede acabar siendo el artículo de nunca acabar; y lo que quiero es dar una visión muy general del Touch con sus pros y sus contras.

Cosas que me gustan del iPod Touch

+ Conectividad Wi-Fi: soy un enamorado de la conectividad inalámbrica. El primer dispositivo Wi-Fi que entró en mi casa fue mi portatil Toshiba hace ya unos cinco años; y desde entonces cada vez hay más cosas que se conectan de este modo a Internet. Si un ordenador está fijo en un lugar de la casa soy el primero que lo conecta por cable porque es más rápido e inmune a interferencias; pero para dispositivos móviles el Wi-Fi es lo mejor que les ha podido pasar.

+ E-mail: la aplicación que gestiona el e-mail funciona estupendamente. Es rápida, fácil de usar y muy funcional. Me gusta mucho poder escribir un mail en cualquier lugar con facilidad y comodidad. Si tengo conexión a Internet lo puedo mandar en ese preciso instante; pero si no, se almacena y se envía en cuanto me conecte a una red Wi-Fi.

+ Google Maps: una de las aplicaciones más útiles que existen. Es raro el día que no uso Google Maps en mi ordenador para localizar alguna dirección, por lo que su inclusión en el iPod Touch me parece todo un acierto por si necesitamos encontrar algún lugar «sobre la marcha». Por cierto, me parece impresionante que tengamos disponible el modo Google Street View.

+ Precisión de la pantalla: el teclado (y en general todo lo que se maneja en pantalla) tiene una precisión envidiable, y lo mejor es que no hay que usar ningún tipo de lápiz táctil para ello. Usaremos los dedos para manejar todos y cada uno de los aspectos del aparato y veremos que su precisión es grande. Y no creáis que hay presionar mucho; un sutil toque con la yema del dedo basta para que el Touch se entere de nuestras intenciones.

+ Navegador integrado: el Touch viene con el navegador Safari integrado y funciona muy bien. No tiene soporte para Flash, pero en general las páginas web cargan con rapidez y uno se puede mover con soltura por ellas. Me encanta que con un doble click sobre una parte de la web se hace un zoom para pasar a ocupar todo el ancho de la pantalla. Si ponemos el Touch en horizontal el navegador se adapta a dicho formato.

+ Aplicaciones externas: la posibilidad de instalar cualquier aplicación desarrollada para el iPod Touch aumenta las posibilidades del aparato. Las hay enfocadas a todo tipo de cosas; desde una que nos permitirá estar al tanto de las misiones de la NASA o consultar el plano del Metro hasta otras tan frívolas como convertir el Touch en una espada de Star Wars o en un nivel de burbuja. Del mismo modo, también hay gran cantidad de juegos disponibles, siendo algunos de ellos técnicamente bastante buenos. Aunque muchas aplicaciones son de pago, hay también un buen número de ellas que son completamente gratuitas (de hecho todas las que aparecen en la siguiente captura lo son).

Las aplicaciones que tengo instaladas en el momento de escribir este artículo. La de la NASA se está descargando en este instante

Aplicación de Metro de Madrid (¡muy útil, currada y encima gratuita!)

El juego Racing GTI (carreras en 3D)

Dentro de su sencillez, Labyrinth 3D tiene unas físicas impresionantes

Cosas que no me gustan del iPod Touch

– Autonomía de la batería: si bien la autonomía como reproductor de MP3 es excelente (la marca dice que una carga completa nos dará 36 horas de audio), esta se reducirá considerablemente si empezamos a trastear con todas las funciones multimedia, Wi-Fi y demás hasta el punto de que si lo usamos intensivamente tendremos que ponerlo a cargar prácticamente todos los días.

– Agarre: hay que tener cuidado al coger el iPod Touch para que no se nos resbale de las manos. Sus bordes son muy finos y están tan pulidos que a veces me da la sensación de que el aparato se puede resbalar e ir al suelo. No se me ha caído ni una vez, pero al sacarlo del bolsillo siempre voy con mucho cuidado para no llevarme un susto.

– Sistema de localización: puede que en grandes ciudades como Madrid o Barcelona sea más preciso; y cuando lo pruebe por allí actualizaré este punto con algún comentario al respecto. Sin embargo, mis tests por Alcalá de Henares han sido decepcionantes: al no tener GPS integrado (el iPhone sí lo tiene) la localización del aparato se basa únicamente en la identificación de las redes Wi-Fi que haya en el alcance del aparato (si es que las hay), las cuales tendrán que estar dadas de alta en una base de datos que relaciona el identificador de la red como sus coordenadas geográficas. En un mundo ideal la idea funcionaría; pero la realidad es que las pocas veces que el sistema me ha posicionado he obtenido márgenes de error de varios kilómetros, llegando al extremo en una ocasión de situarme directamente sobre Castelldefels (Barcelona) cuando en realidad estaba en pleno centro de Alcalá.

Trucos y consejos de uso

· Para ahorrar batería os recomiendo desactivar el push para las aplicaciones que hagan uso del mismo (como el gestor de e-mail). Lo del push consiste en que si está activado, el iPod estará constantemente conectado a Internet por si llega un correo de modo que os lo notificará al instante; pero claro, eso implica un gasto de batería considerable y tampoco creo que pase nada si tardamos un cuarto de hora en recibir un e-mail.

En mi caso, lo que hago es desactivar el push y ajustar un intervalo de comprobación del mail de 30 minutos. De este modo, si la pantalla del iPod está activa (trasteamos por sus menús con el Wi-Fi encendido) se estará comprobando el e-mail constantemente; pero en el momento que la pantalla se apague, el Wi-Fi sólo se conectará cada media hora para ver si hay correos nuevos en el servidor y a continuación se volverá a apagar.

· En el momento que encendamos la pantalla, si había algún correo nuevo aparecerá una cifra junto al icono del mail para indicar dicha situación. Del mismo modo, los correos que hayamos redactado sin conexión y que tengamos almacenados en la bandeja de salida se mandarán en cuanto el iPod se conecte a Internet.

Pantalla de inicio del iPod Touch. ¡Tengo un e-mail sin leer!

· En Google Maps se queda en caché lo último que hayamos visto en el mapa. Por tanto, si no tenemos claro que en el sitio al que vayamos a ir pueda haber una red Wi-Fi disponible puede ser una buena idea visitar esa localización cuando tengamos conexión a Internet para que así la tengamos en la caché y la podamos consultar una vez allí.

· Podéis hacer una captura de pantalla del iPod Touch en cualquier momento pulsando al mismo tiempo el botón central y el de bloqueo. Así es como he sacado las capturas que ilustran este artículo.

Capturas varias

Para finalizar, os dejo con algunas capturas acompañas de algún breve comentario de cosas que se han quedado «en el tintero» a lo largo del artículo pero que no quiero dejar pasar por alto.

Aplicación de Youtube integrada en el Touch. En ella podemos ver vídeos igual que en el PC de casa (pero tenemos que estar conectados a una red Wi-Fi, claro)

Calculadora científica (en vertical se simplifica)

En la mayoría de las aplicaciones, si colocamos el Touch en horizontal el teclado adopta esta disposición para escribir con más comodidad

Aplicación para ver las cotizaciones de la bolsa. ¡Vaya día para los inversores!

Podemos navegar entre nuestros discos a golpe de dedo

Los controles del iPod durante la reproducción (esto se puede "minimizar" y seguir haciendo otras cosas mientras escuchamos música)

Podemos visitar la App Store desde el propio iPod Touch

Y lo mismo con la iTunes Store por si queremos comprar música directamente desde el reproductor

La aplicación de predicción meteorológica. Hasta el momento ha acertado en sus predicciones

Conclusiones

Podemos resumir todo lo visto anteriormente diciendo que el iPod Touch es un dispositivo capaz de cubrir unas cuantas necesidades en un aparato que apenas se nota en el bolsillo. Sin embargo, la mayoría de sus funciones dependen de que podamos estar conectados a una red Wi-Fi; por lo que el Touch será más útil cuantas más redes de este tipo haya en el entorno por el que nos movamos. En medio del campo el iPod Touch es un fantástico reproductor de música, podcasts y vídeo que también hará funciones de bloc de notas; pero poco más.

Sin embargo, en medio de una gran ciudad, con muchas posibilidades de conectarnos a una red Wi-Fi abierta, el iPod Touch se convierte en un pequeño ordenador que nos va a permitir navegar por Internet, consultar el correo y hacer prácticamente todo lo que podemos hacer con el ordenador de casa (salvando las distancias, claro está).

La conectividad a Internet es la clave del Touch; pero… ¿no es precisamente ese el futuro de la informática? De hecho, Google con su Chrome OS plantea algo similar: un sistema operativo para ordenadores personales que necesita Internet para funcionar al 100% y que sin esa conexión no es capaz más que de ejecutar algunas funciones básicas. Está claro que Internet no es nada sin la informática; pero en un futuro cercano la informática tampoco será nada sin Internet.

No volveré a enviar un correo con Hotmail

Iceweasel es la versión para Debian (una popular distribución de GNU/Linux) del conocido Mozilla Firefox; un navegador fantástico cuyo empleo defendemos muchos usuarios a capa y espada tal y como puse de manifiesto en una de las primeras entradas de este blog.

Pues bien, como algunos ya sabréis, en mi Asus EeePC 701 tengo instalado Debian, por lo que mi navegador es Iceweasel, que funciona tan bien como el propio Firefox (de hecho prácticamente es un simple cambio de nombre por temas de licencias). Jamás me ha dado ninguna incompatibilidad con web alguna hasta que hace unos días una amiga me informó de que había recibido un correo mío desde la cuenta de Hotmail (ahora llamado Windows Live Hotmail o Windows Live Mail) completamente en blanco.

windows-live-hotmail

Haciendo pruebas y buscando un poco por Internet enseguida di con el problema; y es que Hotmail presenta una incompatibilidad manifiesta con Iceweasel. De ahí que aunque al enviar un correo desde la cuenta de Hotmail se me notificaba que el mail se había mandado correctamente en realidad el destinatario sólo recibía un correo completamente en blanco.

En fin, a raiz de este desagradable suceso (todo el que haya recibido un correo mío desde la cuenta de Hotmail escrito desde el Eee habrá recibido un correo en blanco) he tomado la decisión de dejar de usar Hotmail para enviar ningún mail, y eso que la cuenta apenas la usaba ya.

Desde hace ya muchos meses a todo el que me escribe a Hotmail le pido que lo haga a gmail en futuras ocasiones, pero a partir de ahora, cuando me llegué un correo a Hotmail responderé directamente desde gmail; vamos, que no volveré a mandar un correo desde Hotmail en los días de mi vida como consecuencia de estas «incompatibilidades» que siempre se dan en los servicios ofrecidos por la compañía de Steve Ballmer y que me empiezan a cansar un poco ya.

Así que ya sabéis, si os apetece contarme cualquier cosa por correo electrónico, por favor, hacedlo a:

luipergmail

¡Gracias!