Caos circulatorio en Nueva Alcalá por la construcción del parking subterráneo del paseo de Pastrana

*Última actualización: 11 de Diciembre de 2009

¿Recordáis aquella historia sobre el aparcamiento subterráneo que se quedó a medio construir en el barrio de Nueva Alcalá? Pues bien, lejos de solucionarse el problema (la situación a día de hoy sigue exactamente igual) hay ahora un colapso circulatorio brutal en el barrio por culpa de un nuevo parking que ha comenzado a construirse en el Paseo de Pastrana.

Paseo otoñal

Este apacible paseo ya es historia

Este nuevo aparcamiento subterráneo se anunció hace ya unos años, pero no se había vuelto a decir ni una palabra del tema. Personalmente, después del fiasco del aparcamiento del centro comercial pensé que no se llevaría a cabo; pero de buenas a primeras, en la tarde del Miércoles 25 de Noviembre unos operarios vallaron una gran zona en el lateral del barrio y colgaron carteles indicando que allí iban a tener lugar las obras del aparcamiento subterráneo «Paseo de Pastrana».

Para que os situéis os voy a poner un pequeño esquema:

En rojo las zonas afectadas por las obras de los aparcamientos

Las obras del nuevo parking son las que quedan a la izquierda de la imagen, y la zona afectada por la obra abandonada desde hace meses del aparcamiento del centro comercial sería el recuadro rojo de la parte inferior. Por supuesto, todas las plazas de aparcamiento en superficie que había en estos lugares han sido anuladas; y aunque en el caso del parking abandonado se habilitó una zona provisional para que no hubiera problemas, en esta nueva obra no he visto todavía tal posibilidad (y lo veo poco probable dado su emplazamiento).

Caos circulatorio en Nueva Alcalá

Entrada a Nueva Alcalá por Río Tajuña bloqueada desde hace meses por la obra abandonada del aparcamiento subterráneo del centro comercial

Caos circulatorio en Nueva Alcalá

Desde el Paseo de Pastrana ya no se puede entrar a Nueva Alcalá

Sea como sea, durante el primer día en el que ha estado cerrado al tráfico en esta zona, el problema circulatorio en el barrio ha sido tremendo: en este momento sólo hay un modo de entrar a la parte Sur del barrio de Nueva Alcalá: la calle Entrepeñas. Del mismo modo, por la parte superior hay dos opciones, pero desde ellas sólo se accede a la parte Norte y al lateral Este, por lo que todo el que viva por la zona inferior está abocado a tomar la calle Entrepeñas que, como ya supondréis ha estado atestada de vehículos durante casi todo el tiempo.

Caos circulatorio en Nueva Alcalá

El acceso desde el Norte a la calle Entrepeñas también está cerrado. Sólo se puede acceder a ella desde el Sur

Si sólo fuera eso el problema no sería grave, ya que con un poco de paciencia se acabaría entrando en el barrio y santas pascuas. Lo malo es que debido al corte de calles recién efectuado, todo el tráfico de salida también se ve obligado a converger en una única vía de salida de tal modo que se forma un atasco que atraviesa todo el barrio y afecta a todas sus calles, que se saturan de coches continuamente.

Mirad, os voy a colocar el mismo mapa de antes, pero esta vez con unas flechas cutres y unas zonas marcadas con colores para que os hagáis una idea de cómo fluye ahora el tráfico (bueno, lo de «fluir» es un decir):

Calles por las que discurre el tráfico ahora en Nueva Alcalá

Como veis, el punto más «conflictivo» de entrada está en la calle Entrepeñas (marcada en azul claro) y el atasco de salida se forma en la calle Río Salado que os marco en color morado en la parte superior. Pero claro, la arteria principal del barrio, que es la calle Río Manzanares (en color naranja) es justo el nexo de unión entre la entrada y la salida de Nueva Alcalá, y por ella han de circular por narices prácticamente todos los vehículos que tengan entrar y la totalidad de los que pretendan salir. La flecha gris marca el recorrido que pueden hacer los vehículos que entren por la entrada Norte, que es de sentido único.

Tabla pintora

Calle Río Manzanares sin tráfico hace unos meses

Obviamente, la situación sería mucho mejor si la obra del parking del centro comercial se hubiera terminado en el plazo previsto, ya que la calle convertida desde hace meses en un inmenso agujero lleno de agua sucia era una vía de doble dirección por la que se podía entrar y salir de la parte Sur del barrio. Yo entiendo que la construcción de un parking subterráneo redunda en beneficio de todos los vecinos y que durante la ejecución de la obra hay que aguantar una serie de molestias; pero lo que no veo lógico es hacer las cosas sin ningún tipo de planificación sobre todo sabiendo que en Nueva Alcalá siempre ha habido atascos a la hora de salir a mediodía y a última hora de la tarde.

Estoy seguro de que los vecinos del barrio no tardarán en hacerse oír en los periódicos locales y demás si no se busca una solución a esto, pues hoy no se hablaba de otra cosa en cualquier rincón de Nueva Alcalá. Los vecinos ya estábamos resignados a soportar bastante tráfico a ciertas horas, pero esto ya es pasarse; y por eso mismo escribo esta entrada: para que podáis ver con vuestros propios ojos la gran chapuza que se ha hecho al ejecutar una obra de consideración sin haber tenido en cuenta algún tipo de solución provisional para no provocar un caos circulatorio que, de no ponerle remedio, durará bastantes meses.

Caos circulatorio en Nueva Alcalá

Colapso circulatorio en pleno centro del barrio. El atasco se extiende por todas y cada una de las calles de Nueva Alcalá

Y todos tocamos madera para que esta obra no se quede parada a medio hacer como ha ocurrido en el parking del centro comercial; porque entonces esto sería ya el desastre perpetuo.

Os mantendré informados de cómo van transcurriendo las cosas actualizando esta misma entrada. ¡Ojalá sea para dar buenas noticias!

27 de Noviembre de 2009

Aunque veo que se han puesto unos agentes de la policía local en la salida del barrio, los atascos han seguido siendo constantes entre las 13 y las 15 así como a partir de las 18 horas. De hecho, esta mañana me di una vuelta por las calles de Nueva Alcalá y capté un par de imágenes para que os hagáis una idea de cómo está el tema.

Caos circulatorio en Nueva Alcalá

Calle Río Manzanares desde el cruce con la calle Bolarque. El coche azul sale de la calle Río Alagón, a la que nos dirigiremos a continuación.

Caos circulatorio en Nueva Alcalá

Calle Río Alagón atascada de coches a la una de la tarde. Hay incluso un coche de la policía local en medio del tráfico.

2 de Diciembre de 2009

Después de una semana de atascos el ayuntamiento ha movido ficha y ha hecho que un tramo del lateral de Paseo de Pastrana que antes era una entrada al barrio por su parte Norte sea ahora de doble dirección. De este modo el flujo de vehículos se reparte a la hora de salir y parece que los atascos han menguado bastante.

4 de Diciembre de 2009

Fotografía de la salida provisional de nueva Alcalá por el lateral del paseo de Pastrana. Ahora los coches pueden salir de Río Manzanares por Río Alberche y acceder directamente a Ronda Fiscal. (Mapa de situación)

Solución provisional al caos circulatorio en Nueva Alcalá

11 de Diciembre de 2009

Se está procediendo a levantar todo el asfalto y las aceras de la parte central del paseo de Pastrana como se puede apreciar en la siguiente fotografía.

Parking del Paseo de Pastrana

Fin de fin de semana

Se acabó el fin de semana. Los últimos rayos de la tarde deslumbran a los conductores que regresan a casa asumiendo con resignación que mañana comienzan otros cinco días de trabajo. La verdad es que tal y como están las cosas es todo un lujo poder quejarse por este motivo.

Vuelta a casa

Como decían los U2 en los tiempos del Achtung Baby: «Smell the flowers while you can».

Un sonrisa en medio del tráfico

Esta mañana volvía en mi coche del trabajo cuando me detuve en un semáforo en la entrada de mi barrio. Normalmente conecto mi iPod Classic a la radio del coche y escucho la música que más me gusta, pero hoy me sentía un poco perezoso y decidí dejar el reproductor en el bolsillo para así sintonizar alguna emisora del dial.

Opté por Kiss FM, que suele emitir algunos éxitos que nunca pasan de moda. Sonó una canción de Police, otra de Celtas Cortos… y justo cuando estaba detenido en el semáforo que os decía los altavoces del coche reproducían «Cómo hablar» de Amaral; una canción que conocía bien por haberla escuchado ya en multitud de ocasiones.

atasco

El caso es que estaba allí detenido justo ante la línea blanca pintada en el asfalto y con el sol dándome de frente en la cara, por lo que opté por desviar la mirada hacia la derecha mientras esperaba a que el semáforo cambiara de color y así pudiera reanudar mi marcha hacia casa. Sin embargo, lejos de encontrarme con un sucio camión o algún anónimo vehículo, pegado a la puerta del copiloto de mi vehículo se encontraba un Citroen Saxo de color azul oscuro; y dentro de él una chica rubia y no muy alta que movía los labios como si estuviera hablando con alguien que, desde luego, no se encontraba en el interior de aquel coche.

Enseguida pensé que estaría hablando por teléfono con un manos libres, pero cuando me di cuenta de que el movimiento de su boca estaba perfectamente acompasado con lo que yo escuchaba por la radio entendí que los dos teníamos sintonizada la misma emisora. No sé, me pareció algo muy curioso y en parte bonito; uno de esos pequeños detalles que te alegran el día. Había tenido una mañana de trabajo bastante intensa y encima me había dejado en la oficina unos papeles a los que quería echar un vistazo esta misma tarde, pero en medio del caos del tráfico, con el sol dándome de lleno en los ojos y atosigado por el calor del mediodía me sorprendí esbozando una sonrisa al encontrarme con aquel mágico sincronismo propiciado por una emisora de radio.

Ella nunca se dio cuenta de aquello; pero el conductor que tenía pegado a mi parachoques trasero se impacientó cuando pasaron dos segundos y yo todavía no me había percatado de que el semáforo ya estaba en verde. Ante el sonido de su claxon metí la primera marcha y me escabullí entre el tráfico despidiéndome mentalmente de aquella chica que por un rato se sintió como la propia Eva en medio de un concierto.

amaral

En el atasco de cada mañana

A la hora que se va a publicar esto os puedo garantizar que estaré metido en una fila de coches que salen todos a la vez de Alcalá de Henares en dirección a Madrid para ir a trabajar. Todos los días me toca pasar un rato en un atasco que ya hasta me empieza a resultar familiar, pero hasta ayer no se me había pasado por la cabeza hablaros sobre ello, así que vamos a hablar un rato sobre algunas cosas inexplicables que afectan al tráfico rodado sobre todo a primera y última hora del día.

En el atasco de cada mañana

Cerca ya de Komatsu en un día de lluvia.

No sé lo que pensaréis vosotros, pero a mí lo de los atascos me parece una de las peores cosas que te puedes encontrar a lo largo del día. Si vas en transporte público y no vas con hora es algo que se puede llevar más o menos bien e incluso te puedes echar una siestecita (es lo que hace mi hermana al ir a la universidad) pero cuando vas a tu puesto de trabajo, tienes que entrar a una hora determinada y ves que varios kilómetros antes de llegar estás parado en medio de una carretera junto a varios miles de vehículos la cosa ya no es tan relajante.

Lo que yo hago es conectar el ipod a la radio del coche y reproducir la lista de mis canciones favoritas. Así al menos hay algo que me hace estar cómodo y relajado. Tengo la ventaja de que si no hay nada de tráfico tardo menos de 10 minutos en llegar desde la puerta de mi casa hasta la puerta de la empresa donde trabajo, pero en días como el de hoy se ha dado el caso de tirarme tres cuartos de hora en medio de un mar de coches; y os aseguro que eso desespera al más pintado. Eso sí, si llego a trabajar en Madrid os aseguro que dejaba el coche aparcado en casa y me iba en tren (que es lo que solía hacer cuando iba a las presentaciones para ultimONivel que tenían lugar a primera hora de la mañana).

Atascos sin fin

En días soleados también te puede sorprender el atasco.

La verdad es que no me entra muy bien en la cabeza la razón por la cual cuando llueve los atascos se multiplican en longitud y duración. En la empresa hemos hablado del tema en más de una ocasión y tenemos dos tipos de razones para esto: una es que sencillamente la gente no sabe conducir con lluvia (la navaja de Occam: «la explicación más sencilla suele ser la correcta»). La otra es que cuando llueve la gente se vuelve más perezosa y en lugar de ir en transporte público coge el coche (aunque no tengo yo muy claro que la diferencia de vehículos particulares circulando sea tan grande entre unos días y otros).

Sea como sea, el caso es que hay días en los que llego a trabajar en menos de diez minutos (no me da tiempo a escuchar ni dos canciones completas durante el trayecto) y otros en los que me entran ganas de darle mordiscos al volante del coche a ver si ese rato de no hacer nada se pasa más rápido.

En fin… ¡saludos desde el atasco de cada mañana!  😉