Mi coche no es excesivamente largo, pero me ha ocurrido una y mil veces (como a todo conductor, supongo) encontrarme con plazas de aparcamiento en fila en las que no cabía por apenas unos centímetros. Una situación que da bastante rabia porque ese «casi hueco» que no puedes aprovechar lo dejas pasar con todo el dolor de tu corazón y ya no te encuentras un sitio completo en el que poder dejar el coche hasta el quinto pino (o más lejos todavía; cosas de la Ley de Murphy).
Precisamente por haberme encontrado con esas situaciones en multitud de ocasiones es por lo que tengo bastante simpatía por ese pequeño coche ovalado que se puede aparcar en multitud de sitios que descartamos cuando conducimos un coche de tamaño normal debido a sus escasos 2,7 metros de largo.
Hay mucha gente a la que este coche le resulta ridículo, pero para mí tiene dos rasgos que me llaman mucho la atención: por un lado su contenido tamaño (como os decía hace un momento) y por otro que gasta menos que un mechero. Además, lleva motor Mercedes, por lo que la fiabilidad mecánica de este coche está asegurada.
La versión más básica tiene 62 CV, más que de sobra para moverse por ciudad, aunque por su poco peso (730 Kg) se defiende bien en carretera; y de hecho he visto más de uno adelantar a coches más grandes por la autovía. Es verdad que sólo tiene dos plazas y que el maletero es ridículo, pero si tenemos en cuenta que prácticamente nunca han ido más de una persona conmigo en el coche y que el máximo equipaje que llevo es la cámara de fotos creo que se adaptaría bastante bien al uso que le doy a un coche.
Vale, a lo mejor no es un coche con una apariencia muy imponente, pero es práctico, gasta poco y para moverse por la ciudad no tiene rival. ¿Sabéis cuántos abogados que se mueven constantemente por el centro de Madrid han cambiado la moto por un Smart? Pues os aseguro que unos cuantos, y os lo digo con conocimiento de causa.
¡Un saludo!
No sé ni cómo te atreves 
Yo conduje uno durante unas semanas porque también me llamaba la atención y las conclusiones que saqué fueron…
1) sí, para uso por ciudad es inmejorable, huecos donde aparcarlo encuentras un montón, y no tienes que preocuparte por ellos, seguirán estando ahí al cabo de 10 minutos porque los demás coches no caben.
2) si lo dejas siempre en la calle cuidadito, parece ser que el robo de piezas en este modelo es mayor que en otros coches (porque son piezas bastante particulares -no estándares- y porque son carillas -cosas de ser un «Mercedes», imagino-), a mí sin ir más lejos me robaron una rueda.
3) para salir de la ciudad ya no es tan recomendable ya que si bien es cierto que en autovía se comporta muy bien a 100 o 120km/h, como te impacten por detrás lo puedes pasar muy mal, no en vano el coche termina apenas un palmo tras tu espalda y no hay estructura para absorber el golpe.
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A mí el Smart no me desagrada, pero puestos así, me quedaría con un Mini (los automáticos son como conducir un kart), que si bien, no es tan pequeño, lo veo un poco más seguro.
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Yo también he tenido ocasión de probar uno y, teniendo en cuenta sus limitaciones, me quedo de lejos con la moto.
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Yo tuve un Smart, me enamoré desde su lanzamiento, hace ya más de 10 años, por todas sus ventajas en ciudad y por su originalidad. Cuando le contaba a alguien que me fascinaba el Smart me decían «Eso te gusta? Si es un huevo con ruedas!» Pero para mí, era (y es) un coche inteligente, práctico y único. Pienso que si la gente comprara más con la cabeza, pensando en el uso real que hace de su coche, el Smart hubiera tenido (y tendría) muchos más compradores.
Este año se estrena otro coche de tamaño reducido, el Toyota IQ, creo que ya está a la venta o lo estará en breve. Mide poco más que el Smart y tiene capacidad para 3 adultos y un niño. Tienen similitudes y diferencias, pero creo que también es una opción innovadora e inteligente. Su precio tampoco será del todo asequible, debido a su calidad y su amplio equipamiento de serie. Supongo que, como el Smart, tendrá grandes admiradores y grandes detractores.
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Viendo vuestras opiniones, podemos hacer un club de fans del Smart… pero por lo que veo soy el único que no lo ha conducido… jejeje.
Y sí, claro que es un coche que tiene sus limitaciones, pero como digo, para ciertos usos (no me iría a Valencia con él, está claro) creo que es un coche más que digno.
¡Saludos!
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