Un par de decisiones con respecto al iPod nano

Llevaba unos días MUY tentado de hacerme con un iPod classic y… no, al final no lo he hecho, jeje 😛 Confieso que se me ha hecho extraño resistirme a mis impulsos compradores, pero es que teniendo en cuenta que hace casi un año que se presentaron esos modelos de iPod (mi hermano tiene uno de 80 GB en negro desde hace meses) y que dentro de poco se presentarán nuevos que ofrecerán más capacidad al mismo precio y menor tamaño (es la tónica que sigue el mundo de la electrónica de consumo) he decidido esperar a ver qué ofrecen esos futuros iPod de séptima generación.

Familia iPod

El iPod classic de mi hermano junto a mi nano.

Esa es la primera de las decisiones tomadas con respecto a estos temas de música portátil, porque el segundo es seguir mi política «antifundas» también con mi actual iPod nano 3G. No sé si recordaréis que en el análisis de dos tipos de fundas para este reproductor comenté que nunca usaba carcasas para ningún aparato, pero que con el nano iba a hacer una excepción. Pues bien, se acabó el uso de la funda por un sencillo motivo: me hice con un nano 3G principalmente porque me encanta su diseño y su escasísimo grosor y lo tengo metido o bien en una funda rígida que lo hace más voluminoso o en una de silicona que lo afea terriblemente.

Trasera iPod nano

Pequeños arañazos en la parte trasera del nano.

Pues bien, como digo he decidido llevar mi nano en el bolsillo sin ningún tipo de protección ya que por lo que he leído en muy diversos sitios la parte trasera se llenará de pequeños arañazos (de hecho alguno se ve ya) pero el frontal parece ser que aguanta perfectamente el «trote» de llevarlo en un bolsillo.

La verdad es que es un gustazo llevar así el nuevo nano, porque gracias a sus dimensiones y su ridículo peso uno se da cuenta de que está ahí porque suena la música en los oídos, pero al quitarte los auriculares realmente te olvidas de que llevas 4 GB de música en el bolsillo.

nano vs. 6630

Nokia 6630 vs. iPod nano.

Por cierto, ya de paso os comento que pese a que estoy muy muy contento con el nano, cero que un classic (o un modelo con la capacidad suficiente como para poder llevar toda tu librería de música) es realmente útil para no tener que andar seleccionando los discos que quieres llevar encima. Ya me ha pasado alguna que otra vez querer escuchar un disco en concreto en medio de la calle y encontrarme con que dicho disco está plácidamente guardado en la librería de iTunes pero no en la memoria del nano 😦

Las pequeñas decisiones de cada día… Pequeñas pero más importantes de lo que parecen.

4 pensamientos en “Un par de decisiones con respecto al iPod nano

  1. Justo el poder llevar tu biblioteca personal en el bolsillo fue lo que me decidió a comprar el Classic de 160GB. Está claro que en el futuro sacarán modelos con más capacidad pero, si fuera por eso, nunca lo acabarías comprando.

    Como complemento, tengo un pequeño Shuffle de 1GB, suficiente para mis salidas a correr.

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  2. Si me voy a esperar a la siguiente generación de iPods no es por tema de capacidad, sino por tecnología. Los actuales classics están llegado al final de su ciclo (se actualizan cada relativamente poco tiempo) y me daría bastante rabia hacerme ahora con uno y que al cabo de un mes anuncien un nuevo modelo que incorporara alguna característica novedosa.

    Y además, en el caso de que los supuestos nuevos modelos no me convencieran siempre me puedo con hacer con un classic de los de ahora porque aquí en España siempre pasan unas cuantas semanas hasta que en las tiendas sustituyen los modelos antiguos por los nuevos.

    ¡Un saludo y gracias por tu opinión! 😉

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